Tabarnia, la nueva ínsula, el despropósito hecho realidad. Como no pueden en las urnas se inventan un nuevo modelo de ruptura. Ni en las mejores comedias han llegado a tal grado de imaginación. Esto tiene que ser que adelantan el día de los Inocentes. O que la bebida durante las fiestas hace estragos en el personal. La resaca del 21D está sentando fatal. Pues ya se sabe, agua y ajo, que van muy bien para estos males de cabeza.
El unionismo rompe moldes. Cómo no consigue llegar al Palau de la Generalitat por medio de las urnas, que ellos obligaron, se montan una división ficticia del territorio catalán, que ni al Conde-duque de Olivares se le hubiera ocurrido. Ni la Constitución y su división de autonomías, ni la leche en verso. Las divisiones se hacen por votos: estos que son tuyos te los llevas a tu lado y estos que son míos, me los llevo al mío. Y a los que son equidistantes que vayan buscando un santo que recoja sus novenas. ¿Y los que no votan? ¿Y los votos en blanco? Quía hoy no es mañana, mañana será otro día, y a ti si te vi no me acuerdo.
Así se montan una nueva autonosuya a la que llaman: TABERNIA: Tarragona + Barcelona, y al resto que le vayan dando Cataluña hasta que se agoten y vuelvan al redil. No hemos quedado que España es una e indivisible y que la Carta Magna recoge 17 mal avenidas. O lo que es lo mismo: muchas, chiquititas y cabreadas. Pues eso, o no.
Estos del independentismo no escarmientan, no entienden que si no entran en vereda, el unionismo (el 155, el triunvirato monárquico, el Rajoy y su elenco, los de la Casa de los Leones, y un sinfín de mangantes que están con el agua en el cuello de la judicatura, imputados y empeñados hasta los ojos) no va a desistir en su empeño de doblegar la colonia secesionista.
¿Qué le vamos a hacer, si desde que fueron abducidos, sediciosos y rebeldes ya no atienden a las “razones del 155”? Y esperad que después del resultado del 21D, se ha abierto la veda “judicial” y están los ojeadores de la guardia civil que no paran. Hacen informes que, cágate lorito, hay delitos que vivían en las catacumbas de las dictaduras y salen a la luz, llenas de telarañas y polvo, como zombis en busca de sangre joven, para alimentarse. Y todas la manis del 11S, se convierten en delictivas, y la alegría de la gente paseando, en armas colectivas, y dentro de poco, el día de S. Jordi, será declarado fuera de la ley, y las rosas y los libros munición altamente peligrosa para la salud democrática de un gobierno corrupto. Y a todo esto, los guionistas del celuloide sin imaginación.
No van a dejar títere con “cabeza”, o más bien “descabezados”. Que se habrán creído estos independentistas que les van a dejar un líder para la presidencia, están equivocados, cabeza que levanten, cabeza que a chirona. Aunque ahora esto se está volviendo un poco de locura. La virreina dice que todo es obra del Rajoy, los jueces dicen que son independientes, la fiscalía al servicio de su majestad y la guardia civil, un todo terreno que va por libre, con la ley por montera y ojo avizor, que desde el 1-O tienen un cabreo de mil demonios y, sobre todo, ahora que ha salido un libro: “Operació Urnes”, la madre que los trajo, estos periodistas, van y explican todo lo que un CNI y los 10.000 hijos de S. Luís no pudieron descubrir, todo el tejemaneje de cómo llegaron las urnas a las mesas de votación. Otro día haré un resumen de la obra. Yo también me hubiera cabreado, pero es que enviar policías de paisano y desconocidos en los pueblos donde todos se conocen por el mote, es de tontos. Todavía no ha sido cesado y ha dimitido nadie dedicado a esto del espionaje, ¡manda güevos!
TABERNIA y su gente, ha sido trending topic mundial (160.000 tuits), es para mear y no echar gota. El martes, los medios de comunicación dieron la tabarra hasta la saciedad, haciendo las delicias de algunos partidos políticos muy escorados a estribor. Y una plataforma (Barcelona is not Catalonia), españolísima como su nombre indica, pide hacer un referéndum sobre la creación de esta nueva comunidad autónoma. Para el tren que me apeo que me está entrando un mareo de no te menees. Venga hombre, reformar la CE de una puñetera vez y dejaros de chorradas.
Desmentir este mapa nuevo sería fácil. Sólo en seis comarcas ganó el unionismo: tres con más del 50% y tres por debajo de ese umbral, pero se apropian de los votos de los comunes, que se mantienen en la equidistancia de unos y otros. Las otras tres ganó el independentismo. Pero seguimos con lo de siempre: se lanza una mentira y hay que estar rebatiéndola. Que duro es perder, y más cuando se juega con las cartas marcadas y al contrario con una mano atada a la espalda.
Y mientras hablemos de Cataluña, lo suyo queda tapado por la cortina de humo. Y el año sin acabar.