Como la política de Interior hacia Catalunya se va por los albañales del estado, una y otra vez, desde antes que el dinosaurio de la Obra, Fernández Díaz y su acólito De Alfonso, españoles-apostólicos-monárquicos-romanos y bocachanclas por encima de todo, salieran en los papeles por su “benefactora labor hacia la sociedad catalana”: “Les hemos destrozado el sistema sanitario y eso te lo afina la fiscalía”. Parecía que lo habíamos visto todo. Pues va a ser que no, que aquello era la punta del iceberg de las alcantarillas del estado. Que no es una sola, son muchas y campean a su aire bajo la mirada del Aguilucho Mayor del reino, fuera de los controles gubernamentales, que sólo aprovechan las migajas para combatir al “opositor”. Que siempre resulta ser el independentismo y sus seguidores, aunque de rebote otros se lleven una colleja, o no entren en listas de gobierno, que todo hay en la viña del señor.

Porque quien no renuncia al pecado separatista entra en el saco de Vade Retro. ¿No es así Iglesias? Que hasta que no jures y perjures que nada de Referéndum, nada de autodeterminación, nada de republicanismo, nada de nada, seguirás a los pies del Monte de la Calavera, o Gólgota hasta que Pedro devuelva la oreja cortada. Y lo de ser ministrable es tan difícil como lo de la investidura de Sánchez el Provisional. Más o menos. Y siempre bajo el palio del IBEX35.

A lo que iba, que me estoy desviando. Ahora regresa el Guerrero del Antifaz, en la figura de BORRELL y sin careta, montando la segunda parte de su cruzada personal: “Dinamitar la política exterior del Govern Catalán”. Ahí es nada. Pero como no está muy clara la cosa, y para abrir boca, lo primero es comunicar a las autoridades internacionales que hay varias delegaciones catalanas, delegaciones, no embajadas, y sí, el ministerio de la cosa las espía, que después te vas de la lengua y lo cambias para confundir al personal, unas delegaciones recurridas ante los tribunales españoles. Porque reabrirlas después que el 155 las hubiera cerrado, requiere los permisos de varios ministerios, hecho que en otras comunidades no ocurre. Pero Catalunya “is different”. Los catalanes no son presuntos rebeldes, son rebeldes, no son presuntos sediciosos, son sediciosos, no son presuntos pacíficos, son violentos, porque así lo decide la Fiscalía que depende del ministerio de justicia, que depende del gobierno de España, que depende de un partido que no llega a asomar la cabeza al borde de la piscina, y todos juntos dependen de la corona, y hasta aquí puedo leer…

Y como el gobierno de España en funciones, si es que lo hay, porque el carácter de provisionalidad va incluido en el puesto, no dirime sus problemas políticos en el campo de batalla de la política, que sería lo lógico y normal, sino que interpone a la “justicia” como un escudo protector para evitar no tener que explicar que eso de la “democracia” es tan intangible que aun no hemos pasado de la primaria. Porque la justicia “es independiente”. O no. Llegamos a la conclusión de que la presunción de culpabilidad se antepone a la de inocencia, y a ti te encontré en la calle.

Como decía de Borrell. De ahí a ordenar a los embajadores a perseguir a Torra en todos los actos en el extranjero, ya que el MHP President puede “DENIGRAR España”, o no. El aguerrido político fantoche, se monta un equipo de 200 “expertos” en refutar, impugnar, contradecir, tergiversar, manipular, entorpecer, poner palos en las ruedas, hacer el ridículo, no, esto último no, que es marca de la casa “España Global”. Pero la cosa clama al cielo, ya que no es sólo Torra el vigilado-espiado-seguido, etc., es que la liebre ha saltado al terreno diplomático cuando menos se esperaba y ha dejado con el culo al aire al ministerio de la cosa externa. Por otra parte, muy habitual salirse de madre. Pero esta vez es como un grano en el culo del “socialismo” europeo y en el de casa para no se rmenos. Borrell está fuera de control, o no, que esto de la política tiene sus intríngulis.

El míster PESC, reciente de la otra cosa europea de exteriores, espía a las delegaciones catalanas en Berlín, Londres y Ginebra (aquí con la ayuda del CNI que se ven desbordados)”, que se sepa por ahora, como un vulgar Villarejo en las alcantarillas que va de las cloacas al poder y del poder a las cloacas y tiro porque me toca. Y eso que decía que de Catalunya no se ocuparía, que si no lo llega a decir. Como será la cosa de escandalosa, que estoy llegando a pensar que un tal García-Margallo era un personaje más inteligente, ¿Cómo estará el patio “sucialista” para compararlo con el de la gaviota?

El encargo era concluyente, hacer un seguimiento de cerca y elaborasen informes sobre las acciones de las delegaciones y del “conseller de Exteriors” catalán, Alfred Bosch. Y como quien no quiere la cosa, darle proyección al procés, aunque sea coartando la acción exterior de Catalunya, y conseguir cerrar las delegaciones. Y para eso nada mejor que contar cuentos, donde las palabras: presos políticos, independentismo, exiliados, tomen las connotaciones que en su día tomaron las de rebelión y sedición para que el procés fuera judicializado. Se dice por los mentideros, que un tal Martínez Vázquez, embajador en Alemania, ha enviando un correo electrónico a su jefe sobre los encajes de bolillos que ha tenido que hacer para evitar una moción a favor del procés de independencia presentado por el grupo Die Linke. 5 puntos más para el próximo ascenso del nene por intervenir en la política de un país europeo. ¡Contentos los tiene!

Por otro lado, en otros niveles de la competencia, vemos que la investidura tiene más agujeros que un queso de Gruyére. Mientras Pedro sigue esperando la genuflexión de Unidas Podemos. La derecha se frota las manos esperando unas nuevas elecciones. Interesa sembrar el descontento entre el personal para que no vaya a votar, y renacer el bipartidismo con más fuerza. Y ahí debería sacar pecho Pablo Iglesias y demostrar que para ser la nueva izquierda, se debe comportar como izquierda. De equidistancias ya hay bastantes en Cataluña.

Pero lo tienes mal, Pablo. Pero que muy mal. Aunque tal como va el reparto de “vares” de mando de alcaldías y diputaciones en Cataluña, a lo mejor tienes suerte y son los propios partidos independentistas, los que se arrimen al autonomismo y te dejen el campo libre para que siembres tu voz en el “desierto” catalán, escaso de la palabra “revolucionaria” de un republicano de pro al que la independencia de Cataluña le da Yuyu. Aunque, bien mirado, en estos momentos, no le echo la culpa a Pablo y sus diatribas sobre pactos con Pedro, que son complicados.

Son momentos de desconcierto entre los partidos que iban por la República catalana, pero que parecen virar hacia el autonomismo, buscando el personalismo clientelar en beneficio propio. Y eso está soliviantando el patio independentista. Aunque espero que no hayan de recibir un voto de castigo, porque méritos están haciendo, y unas elecciones pueden caer antes de que se den cuenta el maestro armero. Esto va por ERC, JxCat y la CUP. Las guerras intestinas nunca fueron buenas para ninguno de los bandos. Aviso a navegantes que los CDR’s se están poniendo nerviosos y comienzan a desconfiar. O 155 y “A por ellos”, o unidad del independentismo. No vale medias tintas, ni  competir para ver quien gestiona una alcaldía o una diputación, que ya deberían estar anuladas, las diputaciones. Demasiados cargos políticos viviendo de la tajada pública, que no es moco de pavo.

Y dejo lo de  la confluencia de casualidades sobre la represión en Cataluña, y lo de DENIGRAR y sus sinónimos para la próxima entrega.