El momento cumbre del juicio, llegó con la presencia del exdelegado del Gobierno en Cataluña, E. Millo, el “mayordomo” (por la facilidad de mentir para proteger al amo) o presunto “virrey” por la gracia del 155, que la virreina SSS no le dejó ocupar, y cuyas respuestas en el juicio del 1-O, le han dejado con el culo al aire y en el punto de mira de los “memes”, convertido en el Pinocho del cuento, y mientras le crece la nariz y le mengua la vergüenza, recrea la historia de la rebelión, pintando un paisaje envuelto en un “clima de violencia” provocado por ”murallas humanas” concentradas en los colegios y atacando con alevosía, nocturnidad y escalo, por no hablar del abuso de las manos levantadas a los piolines indefensos, ante las armas de destrucción masiva en forma de desengrasante llamado “la trampa del Fairy”, esta frase pasará a la historia por la complejidad de su uso:
- “que se trataba de poner detergente en la entrada de los colegios a fin de que patinaran y cuando estaban en el suelo les golpeaban la cabeza con los pies» o «los defensores de los colegios utilizaron artes marciales para golpear el cogote de los policías«.
Y no me extrañaría que Villa Arriba esté mirando de reojo que la Audiencia Nacional, el antiguo Tribunal de Orden Público, el famoso TOP de la dictadura disfrazado de “democracia”, no le envíe los picoletos, vitoreados por los de Villa Abajo con un “A por ellos”. Cosas más raras se están viendo.
Esto no me lo he inventado, aunque me cuesta creer como se golpeaba en el cogote a un antidisturbios con casco y protecciones, incluso habla de que un “quad” atropelló descaradamente a un agente, y es que, a las manis y concentraciones, vamos cada uno con nuestro quad, por si acaso. Al tiempo que una columna de ninjas con conos y otros pertrechos, protegidos por el cuerpo policial de indepes al mando de Puigdemont, Forn y el major Trapero, junto a los pringaos de los CDR que aun no se habían formado, atacando al estilo de Bruce Lee todo robocops que se encuentran en el camino.
- Albert, agarra el bote de Fairy que yo lo haré con el cono, y después del gim, dejamos el tatami y nos vamos a hacer un poco de República. Y echa más papeletas al fuego que esto es la guerra…
Y es lo que pasa cuando un fiscal “amigo y afinador” anima al testigo. A este se le calienta la boca y es un no parar de incontinencia verbal, hasta “artefactos incendiarios” corren por los informes, y más tarde se ha sabido que en el patio del cuartel de la GC de Igualada apareció un chándal del ejército quemándose sin saber si lo habían hecho desde fuera o desde dentro, porque un chándal es fácil de tirarlo por encima del muro y llegue hasta el centro del patio, pero aprovechando el paso del Pisuerga todo el monte es orégano.
Lo que todavía no queda claro es por qué ante tanta “violencia”, sólo se habla de cinco detenidos, y no de un mogollón como suele ocurrir en casos de manifestaciones de cariz violento. Supongo que era por las prisas en acabar a la hora de comer. Ya que dio la “casualidad” que todos pararon a la misma hora, a las 14:00 horas, que concuerda con la hora en que corría el rumor de que la Merkel estaba casi afónica de gritarle al “Sobresueldos” lo inútil que era, y que parara la violencia que las noticias en las teles internacionales, libres de censura, echaban humo por las antenas. Pero eso no consta en actas, ni en informes, puede que la rumorología se adelantara a los acontecimientos.
Según el piquito de loro de Millo, él, delegado de toda la parafernalia política del momento, no sabía mucho de la cosa porque estaba en su despacho y los responsables de los “operativos” en la sala de al lado, y sólo los veía cuando se cruzaban en los pasillos, o en la máquina del café. ¿Será por eso lo de mayordomo? o ¿Estaría con la oreja detrás de la puerta a ver si pescaba algo de “violencia”?
Pero lo de asumir responsabilidades sobre la proporción o desproporción de las “cargas policiales” no entra en el lenguaje de estos políticos que han regido nuestra vida y hacienda en el siglo XXI, con métodos de la Edad Media.
Resumiendo lo de las armas de destrucción masiva. Se han encontrado las siguientes: lazos amarillos, silbatos, caretas, aviones de papel, conos voladores, vallas incontroladas, quad, pegatinas, y un sinfín de elementos que nos hacen presumir de que la rebelión nació en un centro comercial.
¡Berlanga ven al rescate! Que lo que te estás perdiendo no tiene precio. “La Escopeta Nacional” sería como un cuento de hadas comparado con la historia del juicio del 1-O.
Chaquetero mayor del reino le llamaría yo, ya que ha pasado como diputado de CiU, compañero de parte de los acusados, seis años no son nada y los sobres del PP eran más llamativos, con tentativa de pasarse a ERC que no llegó a cuajar porque no se fiaron de su nariz “in crescendo”. Y ahora haciendo méritos para ir al Parlamento europeo. Espero que los idiomas se le den mejor. Porque de honradez no hay esperanza de mejora. Incluso su hermano no lo deja en buen lugar. Hay cariños que duelen.