El Bribón navegó de nuevo con viento a estribor.
Como dice J. Barbeta en su interesante artículo del día 22/05/2022, titulado: “Este artículo tampoco sirve para nada”, publicado en El Nacional: “El rey ladrón ha vuelto y ha sido recibido con clamor popular”, “La impunidad de los monarcas y de los cortesanos se ha convertido en ley” y “la depravación que antes se sospechaba, ahora se proclama sin vergüenza ni escrúpulos”. No obstante, a mi me hace reflexionar y aportar mi grano de arena para denunciar las corruptelas institucionales, entre los tres “poderes del estado”. ¡Ay Montesquieu! Si levantaras la cabeza”. Esto se ha convertido en un putiferio pleno en una “democracia defectuosa”.
Como un encaje de bolillos. Así funciona los maquilladores institucionales para “lavar” la cara de la corruptela coronada. Y todas las instituciones del estado parecen estar coordinadas por una mano trilera que mueve la bolita y nos quedamos a verlas venir. Lo importante es darle un buen carenado a los bajos monárquicos para que vuelva a ”navegar” sin que se escore la “democracia plena”, o sí. Que después los “republicanos” se mosquean y hacen referéndums para saber si monarquía o república, aunque eso ya se sabe que suena a milonga, y los nostálgicos del régimen se agarran con uñas y dientes a que se votó monarquía. Hay lupas que no dan más de sí.
Pero eso sería entrar a dilucidar si el kit Constitución78-Monarquía era lo justo, lo legal o lo trilero. Que Suárez hizo una finta de filigrana para esquivar lo que decían las lenguas de doble filo, que, si se hacía un referéndum como exigían los países democráticos, la monarquía se iba por la Barranquilla con el caimán, y eso no podía ser, ya que el dedo incorrupto lo dejó bien atado y no se debía perturbar su “descanso” ideológico y hereditario. No olvidemos que el 22 de noviembre de 1975, dos días después de la muerte del dictador, juró, en las Cortes, diciendo aquello de: “Juro por Dios y sobre los Santos Evangelios, cumplir y hacer cumplir las Leyes Fundamentales del Reino y guardar lealtad a los principios que informan el Movimiento Nacional”. ¡Ahí es na! Y eso marcó carácter. Y hay deudas que duran una eternidad.
Como dice un tal Villarejo, en la actualidad más cercana, reconociendo que en la “Operació Catalunya” se han hecho actuaciones “absolutamente ilegales” y que “las volvería a hacer”. La cuestión es frenar el independentismo, como sea. Aunque se intervenga y manipule la información de unas elecciones, que la JEC está para mirar al balcón de la Generalitat porque hay un cartel en favor de los presos políticos y después a favor de la libertad de expresión, que eso si que es un pecado “electoral” o un acto de “terrorismo” político. «Es una auténtica aberración pensar que el CNI funciona dentro de la legalidad. Los espías están para espiar», dijo. Y un tal MpuntoRajoy, en paradero desconocido, le felicitó y le dijo:” ¡Usted es un español!” Todo por la patria. Que eso de la Transición aún está por llegar.
Un apunte. Atendiendo a la última encuesta de Electomanía, sobre monarquía o república a escala estatal, da como resultado que un 50,7% se decide por la república y un 46,6% por la monarquía, sin olvidar que un 58,8% está por celebrar un referéndum, respecto al tema. Esperamos más fintas institucionales para esquivar el referéndum, que ya sabemos que los carga el diablo.
La derecha de siempre y la adjunta, puestas de acuerdo en señalar la “gran transparencia” de la corona. La otra “derecha”, ¡Perdón! La otra parte, que no es la contraria, republinárquica con el gobierno más progresista a la cabeza, distrae la mirada y hace un Rajoy de ida y vuelta, manteniendo un perfil de nivel bajo, a pesar de que los colegas de gobierno, los de Podemos-Unidas alzan sus críticas al viento como si eso sirviera para algo. Pero, al menos le da una pátina de izquierda, pero sin mucho lustre que después los tachan de comunistas-marxistas-leninistas y no sé qué cosas más que a la hora de que la derecha se crispe y los pongan de hoja de perejil, es decir, verdes.
La excusa del retorno, es ver y “participar” en las regatas en Sanxenxo, que ya ha sido puesto en el mapa, a pesar de que hay gallegos que les da dolor de tripas la presencia “emérita” y echándole bemoles a la cosa se han manifestado: “Galizia non ten rei”, o “los borbones son unos ladrones”. Así que ya somo dos los que nos da urticaria la monarquía. Si a esto se le añade la “omertá” institucional que, para mí, es que nos están levantando la camisa y robando la cartera, otra vez más, es para echar a correr. Y es que en este “lavado” están olvidando las “causas abiertas” contra el “hijo pródigo”, las “cerradas por las puñetas fiscales” y las que aún quedan sangrantes, como las británicas. Aunque lo que subyace detrás de este postureo es chulearnos, costumbre muy arraigada en la saga borbónica.
Así que el impresentable, e irresponsable Juanca, respondiendo a los periodistas sobre sus cuentas en Suiza y las comisiones recibidas, aunque según sus abogados son “regalos y reconocimientos” de las monarquías absolutistas del golfo pérsico, Explicaciones, ¿de qué? jijijaja. Se ha ido por donde vino, en un jet privado de 47M€, con lo que alcanza su “real pensión”, a Abu Dabi, para seguir viviendo a cuerpo de “rey”, después de darse un garbeo por la Zarzuela, donde un grupo de aficionados a las corridas, ¡Perdón! al boato de los vasallos, en una escena esperpéntica, lamentable, triste y humillante, según la prensa, de genuflexión y casi besamanos, aplaudiendo al “supuesto” defraudador real, o no tan supuesto.
Lluis Bou, en El Nacional, señala que “es la más grande operación de imagen que ha hecho la monarquía desde el intento de golpe de estado del 23F. Después que la justicia española hubiera desactivado las tres investigaciones que oprimían al rey emérito”.
No estoy seguro, pero creo que se refería al “Elefante Blanco” que nunca más se supo de él.