Un día después de la firma del acuerdo entre PSOE y ERC, la derecha, más derecha que el mando del grifo, del agua fría, sale al paso de las hordas “rojas” a parar el carro de la investidura de Sánchez, cuan centinela de occidente, en forma de JEC. Todo un fantasma del pasado envuelto en togas negras se posa por encima de la democracia para dejarla con las cagadas propias de un régimen anterior al 78, o es el mismo con los ojos vendados y la espada caída hacia la derecha.
La JEC, comiéndose las uñas por los nervios de la prisa y arremangándose las togas por encima de la decencia, ha tomado la decisión de inhabilitar, por primera vez en la historia de Cataluña, a un presidente en activo. Es un decir, porque es el tercer mandatario catalán represaliado por la “justicia”, y el segundo consecutivo que se intenta cesar en medio de un mandato. Y como eso de la casualidad es un cuento chino que ya no sale en el TBO, tendremos que pensar hay una mano negra que mueve los hilos de las togas para conseguir lo que las urnas no pueden.
Siguiendo el camino trazado por el 155, Llarena y Marchena, por no señalar con el dedo que está feo, a toda la cúpula judicial que está a partir un piñón para ver quien se lleva el ascua a su sardina y consigue la medalla de anticatalán del año. Es como si hubiera una competición en la cúpula judicial y fiscalía para llegar el primero a la silla dorada del CGPJ, donde un tal Lesmes (Presidente del CGPJ en funciones) está allanado el camino para una entrada triunfal de la derecha, en todas las ramas del poder judicial.
Reconozco que la Gaviota ha hecho muy bien su trabajo desde hace un tiempo, moviendo sus fichas por el damero político, para acaparar lo más alto del poder judicial y parte del “extranjero”, y ahora obtiene sus rendimientos, sin tener que entrar en política, porque con la partida de ineptos que tiene no se comería una rosca, ni siquiera un donuts. Y la “seudoizquierda” e izquierda”, y ¿Por qué no, los partidos independentistas? Entretenidos en las portadas y titulares para ver quién salía mejor en el selfie de turno.
Pero, la derecha, tacita a tacita, se está quitando de en medio todo el que hace sombra para llegar a la Moncloa. Si a la Moncloa. O
¿Es que alguien cree que toda esta movida es sólo para eliminar las piezas del independentismo catalán? Pardillos, más que pardillos. Yo entre ellos.
Esto lleva camino de romper la baraja de las negociaciones de investidura y provocar nuevas elecciones. Si, sé que lo que digo es muy fuerte pero cosas más difíciles se han visto en este secarral político de la viña borbónica.
De entrada, la JEC retuerce la ley y hace una interpretación “sui géneris” del art. 6.2 de la LOREG referido a una excepción a los terroristas o casos gravísimos, y vuelve la partida al punto de salida asimilando: “No descolgar una pancarta sobre presos políticos y libertad de expresión” con el terrorismo. Y, así, en lugar de “dar de baja” a la brava al President elegido por el Parlament, que no puede hacerlo, se va por la tangente de la puerta de atrás y lo inhabilita como diputado, y como el Estatut dice que un Presidente tiene que ser diputado del Parlament, pues “miel sobre hojuelas”, o lo que es lo mismo “blanco y en botella…”. Lo que no dice la LOREG y lo dice el Estatut en su Art. 57 “Estatuto de los diputados” es que “En las causas contra los Diputados, es competente el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña…”, y ninguna ley dice que después de ser investido un presidente, tenga que ser cesado porque un tribunal administrativo le hace perder el escaño. Y como la JEC no está en el Estatut, ni autorizado por éste, así que arrea y vámonos para Judea.
Pero como la JEC es el capo de la “familia” electoral, le quita el fajín de mando a la JEProvincial de Barcelona que ya había dicho que “no se podía retirar a Torra su condición de diputado”, y se salta la barrera de la democracia para cumplir el “objetivo” del “Deep State” que se mueve en las sombras. Misión cumplida, majestad. Porque la Constitución es su madre y al Estatut lo encontró en la calle.
Y puesto en faena, lo mismo les da inhabilitar al President Torra que quitar el escaño de eurodiputado a Junqueras, que eso de que la sentencia del TJUE es una rabieta de la democracia contra la España profundaunagrandeylibre. Y como está dirigida al TS y no a la JE, ésta le roba la cartera del bolsillo de la toga. Así lo dice Casado (PP) que tiene mano directa con los “ángeles justicieros” antes de que sea publicado el acuerdo por el que dejarían a Junqueras entre rejas, sin escaño, y hacer correr la lista de elegidos. Y mi voto, y el tuyo y el otro, se van a hacer puñetas porque eso del sufragio pasivo es una coña marinera que los togados se lo pasan por la pernera de la toga. Cómo ellos llegan a sus cúpulas sin pasar por el voto ciudadano, pues para que hablar de representatividad, o de justicia, o de democracia.
Y es que la JEC le metió un gol por la escuadra al Parlamento Europeo y éste le tiró de las orejas con demasiada “amabilidad” para que la “justicia española” se diera por enterada.
No me extraña que una TV pública alemana alucine pepinillos viendo como “Una autoridad electoral destituye un presidente”. Ni tampoco me extraña que J. Urías (profesor de derecho constitucional) salga al paso y afirme que: “El imperio de la ley no se puede convertir en el imperio de los jueces”. Pues parece ser que por ahí va la cosa. También el exconsejero vasco Joseba Azkarraga ha puesto el dedo en la crítica dejando en ridículo el intento del gobierno del PSOE, que esquiva sus culpas sobre la decisión de la JEC, y lo pone en el punto de mira: ”Que cada uno asuma sus responsabilidades. La Abogacía del Estado, en su escrito, aludía a la JEC para que ella decidiese”, y que la Adriana Lastra (PSOE) no se haga de nuevas: “el gobierno español ha provocado esta decisión”.
Hasta A. Losada no ha podido ocultar su crítica y ha dicho que nadie en su sano juicio le habría reprochado a la JEC que siguiera el camino de la JPBarcelona. “Pero esperar sensatez en España empieza a ser llorar”.
Y que la “decisión (injusta y necia) sale de una JEC partida por la mitad… si no está muerta, agoniza”. Y es que las decisiones de inhabilitación de Torra y de quitar la silla a Junqueras se tomó como si fuera el tren de los hermanos Marx “¡Esto es la guerra! ¡Traed madera!
En el primero 7 a favor de inhabilitar a Torra y 6 decían de esperar la actuación del TS. Y en el caso de Junqueras, 8 a favor y 5 a esperar al TS.
Aunque Losada sigue hablando de daño irreparable, yo no creo que eso detenga el pensamiento de este tribunal que ha actuado con premeditación y alevosía, prevaricando hasta las cejas en algo que podía haber esperado a que el TS se definiese.
Un tribunal de carácter administrativo se ha subido a la parra de la política y tomando el mazo por bandolera ha ejecutado un silencioso “golpe de estado de las togas” que traerá consecuencias, pero será demasiado tarde para recuperar el sentido común en el terreno de la política.
Todo lo relativo a la justicia española es una farsa. El Poder Judicial tiene una dependencia del Poder Político para llevar a cabo objetivos políticos. Cuando digáis lo que pensáis sobre los «Judicatas», las «Ratas de Cloaca» y el entrelazamiento cuántico entre ellos, pensároslo antes de decirlo; os pueden acusar de apología de cualquier cosa. Fijaos en los problemas que tubo aquella que contó un chiste sobre Carrero Blanco. Las actitudes y aptitudes de esta gente son unas de las numerosas razones, debido a las cuales, se ha incrementado considerablemente el número de catalanes con el deseo de vivir en… Read more »
Amigo Antonio. En este sistema nadie está libre de pasar por el «cuartelillo». Donde se unifica la base de los tres poderes en uno y trino. Un abrazo.